jueves, 17 de septiembre de 2009


"secreto de Bill..."

hello!! esta es una historia sobre los gemelos de tokio hotel en la cual esta involucrado su representante y productor David Jost, escrita (o inventada) por Khira*****
espero que NO LES GUSTE. besos

Tom Kaulitz estaba de pie en su habitación del hotel, con el corazón desbocado y respirando con dificultad. Pero su agitación no era el resultado de ningún esfuerzo físico, sino a causa de algo que acababa de ver. La escena que había presenciado hacía escasos segundos en la habitación de su hermano se repetía una y otra vez en su mente, y Tom estaba completamente seguro de que le acompañaría durante mucho, mucho tiempo. Respiró hondo tratando de calmarse, pero en lugar de eso, un profundo sentimiento mezcla de ira y una profunda decepción se fue adueñando de él.
Una serie de golpes suaves y secos se escucharon al otro lado de la puerta de su habitación. Tom se aproximó lentamente a la puerta y colocó su mano derecha en el pomo, pero sin llegar a abrir.
-Tom, soy yo -dijo al momento una voz ahogada-. Déjame entrar, por favor.
-Sí que te has dado prisa en vestirte -comentó Tom de forma hiriente.
-Por favor -repitió Bill-. No podemos hablar aquí. Podría aparecer alguien por el pasillo y escucharte.
Tom dio un tirón y abrió de mala gana la puerta. Sin esperar a ver el rostro de su hermano, retrocedió nuevamente hacia el interior de la habitación. Bill cerró la puerta y le siguió.
El mayor de los gemelos Kaulitz se cruzó de brazos mirando hacia la ventana, pero sin dejar de observar de reojo los movimientos de Bill, quien se había quedado a un par de metros de él, como si no se atreviera a acercarse más.
-¿Y bien? -se impacientó Tom, mirándole a la cara por fin. Entonces se fijó en la palidez que adornaba el rostro de su hermano, pero eso no le ablandó-. ¿De qué querías hablar?
-De... de lo que acabas de ver... -comenzó finalmente Bill-. Yo... lo siento, quería contártelo, pero no sabía cómo ibas a reaccionar y me daba miedo... -soltó de un tirón.-Mira Bill, no me vengas con cuentos ahora, ¿quieres? ¡Eres un mentiroso que ha estado engañando a todo el mundo, no sólo a mí! -casi gritó-. "Nein, ich bin nicht schwul"("no soy gay") -recitó imitando burlonamente la voz de Bill-. ¡Y ahora no sólo resulta que sí que eres gay, sino que encima te estás tirando a uno de nuestros productores!
Bill parecía a punto de llorar.
-David y yo...
Pero no pudo continuar. Un entrecortado sollozo se lo impidió. Finalmente la ira de Tom se disipó un poco y la sustituyó una profunda tristeza. Tanto que presumían de conocerse el uno al otro, y en realidad no sabía nada de Bill. Eso era lo más doloroso de toda la situación.
-Vete -dijo con tono cansado-. No quiero hablar de esto ahora.
Bill no insistió y se marchó al cabo de pocos segundos. Tom se cubrió la cara con las manos y suspiró.
En esos momentos de una sola cosa estaba seguro: nada volvería a ser como antes entre él y su hermano. Nunca.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

historia de terror "4 puentes"

hola como estan..? América! eehh..! bueno, no se ni lo que escribo a esta altura de la noche...
pero me gustaría contarles una HISTORIA DE TERROR. espero que les guste!?
se llama "4 PUENTES"
Rebeca tenía dos abuelos a los que adoraba, pero ahora están muertos. Y sobre ellos es la historia que os voy a contar. Un día el abuelo falleció y la abuela quedó como un alma en pena vagando por la casa que habían compartido tantos años en amor y armonía. Aún tenía familia por supuesto, pero no era lo mismo. La abuela tenía mucha confianza en Rebeca, tanta que terminó confesándole algo que le ocurría: soñaba con su marido muerto. "Hay cuatro puentes, y al final de los puentes está él, alargando la mano para que vaya con él". Pasaron los días y los meses, y una noche fue Rebeca la que tuvo un sueño extraño: Era pequeña y entraba a un ascensor con su abuela. Iban cogidas de la mano y el elevador ascendía pisos y pisos. Una especie de viaje sin retorno puesto que el ascensor no era familiar para Rebeca. No sabía cuántos pisos habían ascendido cuando, de pronto, el ascensor se paró y se abrieron las puertas. La abuela soltó la mano de Rebeca y salió. Ella trató de avanzar pero su abuela le dijo: "No, tú no vienes conmigo". La abuela le sonrió en su sueño y aquí terminó todo. Cuando Rebeca se despertó por la mañana su abuela había fallecido la misma noche. En el sueño se había despedido de ella. Y me preguntaréis, ¿qué tienen que ver los cuatro puentes en esta historia? Cada puente es un mes. La abuela falleció cuatro meses después que su marido, o sea, cuatro puentes después... y recordad que ya os lo decía ella en su sueño: al final de los cuatro puentes, su fallecido marido le tendía la mano.Tengo que avisar que Rebeca tuvo después y durante años la desagradable experiencia de "ver" a su abuela mirándola desde coches de desconocidos, como si la estuviera observando, y siempre, siempre, echaba a correr llorando hasta llegar a casa.